En el inicio de las sesiones ordinarias del Congreso, Amado Boudou pasó de la ovación que le dedicaron militantes kirchneristas, a la sorpresa por los carteles en los que se lo acusaba de mentir y billetes similares a los de $100, pero con su cara, que caían desde algunos sectores del recinto, en alusión a las acusaciones que recayeron sobre su figura por la supuesta influencia en las concesiones obtenidas por la empresa calcográfica Ciccone.
Al llegar al Congreso, cerca de las 11, Boudou fue recibido por los militantes K al grito de "Atención, atención, Amado te saludan los soldados de Perón". El vicepresidente saludó y luego se acomodó a la espera de la llegada de Cristina. Minutos después, comenzaron a verse carteles que decían "Boudou miente".
Pero eso no fue todo. Los billetes (ver imagen), con el rostro del vicepresidente, denominados "100 Boudues" y que decían haber sido impresos en el "Banco Central de la Guitarrita Argentina", comenzaron a caer desde distintos lugares del recinto. Una chicana en medio de las acusaciones contra el vicepresidente por el caso Ciccone.
Antes de la inauguración, Boudou se refirió por segunda vez al tema y reiteró que "es una gran mentira" y volvió a acusar a Clarín de querer que "este Gobierno se caiga" con esa noticia. (Clarin)
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