Luego de las violentas declaraciones del viernes del piquetero Luis D’Elía, el kirchnerismo redobló ayer su avanzada contra el juez federal Claudio Bonadio por investigar presuntos delitos por parte de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner en el manejo del hotel en El Calafate del que admitió ser dueña a través de acciones.
Ayer, el secretario de Justicia, Julián Alvarez, en una velada amenaza, recordó en un reportaje que el magistrado tiene “nueve expedientes” en el que se analiza su conducta en diversas causas en el Consejo de la Magistratura. El número, incorrecto, fue reiterado todo el día por los medios vinculados al oficialismo. E incluso desde la cuenta de Twitter oficial de Casa de Gobierno (@casarosadaAR), se difundió esta y otras informaciones para atacar al juez.
“Bonadio viene montándose un escudo frente a los nueve expedientes de destitución que tiene en el Consejo de la Magistratura. Cada vez que el Consejo de la Magistratura sesiona Bonadio toma una medida contra el Gobierno”, expresó Alvarez en una entrevista publicada ayer por Página/12.
“Vamos a plantear que no se puede ejercer justicia a través de la coacción. Haremos una presentación donde vamos a demostrar la conexidad que existe entre las convocatorias al Consejo de la Magistratura y las medidas que dispone Bonadio. Vamos a avanzar también y pedir el tratamiento en la comisión de Disciplina de los expedientes que se están tramitando en los que hay sobradas pruebas de lo que se le imputa”, adelantó el representante del Poder Ejecutivo, es decir la Presidenta de la Nación, en el organismo encargado de seleccionar y promover la destitución de los jueces en caso de mal desempeño de sus funciones.
Al igual que otros referentes oficialistas, Alvarez vinculó las decisiones del magistrado con algún tipo de interés político relacionado con el Frente Renovador liderado por el diputado Sergio Massa, uno de los precandidatos presidenciales para las elecciones de 2015.
Es más, ayer el senador Aníbal Fernández salió a decir que “en ningún país del mundo, si es una empresa del Presidente de la Nación, hacen este gesto”, en referencia al allanamiento ordenado la semana pasada por Bonadio en las oficinas que la empresa Hotesur había declarado ante la Inspección General de Justicia (IGJ.
Bonadio investiga una denuncia de la diputada Margarita Stolbizer por la supuesta falta de aportes de datos sobre la composición del directorio de la sociedad y el presunto no pago de tasas. La oficina allanada por Bonadio estaba vacía y en alquiler.
La avanzada de Alvarez contra Bonadio no es nueva. A principios de año, apenas asumido en el Consejo de la Magistratura como representante del PEN, había pedido más tiempo para estudiar una acusación contra ese magistrado por su actuación en las llamadas causas Tandanor y Yoma. Fue cuando el juez comenzaba a avanzar en investigaciones contra el ex secretario de Comercio Guillermo Moreno y el vicepresidente Amado Boudou, entre otros expedientes. Pero el kirchnerismo no cuenta por sí solo con el número necesario para aprobar su enjuiciamiento en el organismo (ver aparte).
Además del número equivocado de expedientes en trámite contra Bonadio en el Consejo (son ocho y no nueve, como informaron varios medios, ya que los casos Tandanor y Yoma están unificados en uno solo, recordaron fuentes del organismo), ayer circuló información errónea sobre este tema.
Bonadio no fue denunciado por un tribunal oral que criticó su actuación en esas causas que terminaron prescriptas sino que lo hicieron los titulares de dos ONGs que siguen los casos de corrupción y simpatizan con el kirchnerismo: la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ) y el Centro de Investigación y Prevención de la Criminalidad Económica (CIPCE).
Y quien reflotó este caso en el Consejo fue el propio Julián Alvarez, muchos meses antes que se abriera la investigación contra la presidenta Fernández de Kirchner por presunto abuso de autoridad e incumplimiento de los deberes de funcionario público.
Las críticas a Bonadio habían comenzado el viernes de manera violenta y poco feliz: el piquetero Luis D’Elía había propuesto por Twitter: “Ante el golpe judicial simbólicamente debemos dejar clavada en una pica la cabeza de Bonaadio en la vereda de Comodoro Py. Destitución ya”. El ex piquetero será denunciado hoy penalmente por presuntas amenazas en contra del magistrado que tiene a su cargo la causa contra la Presidenta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario