A MODO DE PRESENTACION

Ya esta. El sueño se cumplió. Dejare de escribir en las paredes, ahora tengo mi pagina propia. Soy un periodista de alma, que desde hace 40 años vive y se alimenta de noticias. Tenia 18 años cuando me recibieron en El Liberal de Santiago del Estero, el doctor Julio Cesar Castiglione, aquien le debo mucho de lo que soy me mando a estudiar dactilografia. Ahí estaba yo dando mis primeros pasos en periodismo al lado de grandes maestros como Noriega, Jimenez, Sayago. Gracias a El Liberal conocí el mundo. Viaje varias veces a Europa, Estados Unidos, la lejana Sudafrica y América del Sur, cubriendo las carreras del "Lole" Reutemann en la Formula 1. Después mi derrotero continuo en Capital Federal hasta recalar para siempre en Mar del Plata, donde nacieron tres de mis cinco hijos y conocí a Liliana, el gran amor de mi vida. Aquí fui Jefe de Redacción del diario El Atlántico y tuve el honor de trabajar junto a un enorme periodista, Oscar Gastiarena. De el aprendí mucho. Coqui sacaba noticias hasta de los edictos judiciales. Bueno a grandes rasgos ese soy yo. Que es Mileniomdq, una pagina en la web en donde encontraras de todo. Recuerdos, anedoctas, comentarios. Seré voz y oídos de mis amigos. Ante un hecho de injusticia muchas veces quisistes ser presidente para ir en persona al lugar y solucionar los temas. Eso tratare de ser yo. Una especie de justiciero ante las injusticias, valga el juego de palabra. No faltaran mis vivencias sobre mi pago, Visiten el lugar, estoy seguro que les gustara. Detrás de mis comentarios idiotas se esconde un gran ingenio.

jueves, 22 de febrero de 2018

LOS 6 SEGUNDOS CRUCIALES QUE PUEDEN CAMBAR LA VIDA

Por Natalia Lopez

Cada día tomamos cientos de decisiones, algunas irrelevantes y otras de ésas que pueden cambiar el curso de nuestra historia ¿Las tomamos a todas de la misma manera? Según las neurociencias tenemos una especie de “botón interno” que ayuda en el momento de decidir. En ese proceso, los primeros seis segundos pueden ser clave. Y hoy existe una técnica para poder decidir acertadamente.
Responder un mensaje con enojo u ofender en una discusión, muchas veces son las respuestas automáticas que tenemos ante una emoción fuerte, no siempre deseadas.
La técnica de los seis segundos consiste en frenar y pensar de manera concreta la situación que hace salirnos de control. Es tomar como un aliado ese tiempo para procesar la decisión y actuar sin tanta impulsividad. El famoso contar hasta 10 de las abuelas, pero aggiornado.
Si uno se detiene en lo que le está pasando, esa suerte de botón de pausa puede evitar esas reacciones que se tienen con lo primero que pasa por la cabeza, pero en los primeros seis segundos del pensamiento. Ante una situación crítica se puede activar ese “botón interno” y usar ese tiempo para pensar y tomar una decisión que frene el impulso.
“Darle el tiempo a la corteza cerebral para tomar el comando de la acción, que muchas veces tarda más en reaccionar -explica Matías Bertone, doctor en Neurociencias y docente de la Universidad de Belgrano. No es lo mismo un choque donde la proactividad debe ser inmediata, que una pelea con la pareja o un jefe, donde el tiempo no es crucial. Es mejor consultarlo con la almohada, cuando el tiempo no apremia. Deberíamos ser conscientes y reflexionar”.
El sistema de seis segundos se puede utilizar para todas las decisiones que se toman: dietas, cigarrillos, alcohol, medicamentos, discusiones... Lo recomendable es tomarse un momento y buscar racionalidad.
Era una tarde calurosa en Ramos Mejía cuando tres asaltantes entraron en el comercio de Sebastián Gallo, de 36 años. La familia ya había sufrido varios robos, pero ninguno como éste. “Fue violento y sucedió todo muy rápido, nos metieron en un baño y nos golpearon. Fue un instante. Casi intento defenderme, pero cuando preguntaron por la plata que estaba en una caja fuerte, respiré un segundo, les dí la clave y ayudé a que se fueran. Podía percibir el peligro y tenía que decidir rápido”, recuerda.
La psicología explica que las personalidades y el contexto ante determinada decisión también resultan clave. “El marco de referencia que tiene cada uno es importante. Las creencias que se forman a lo largo de nuestra vida, el lente con el que miramos, el estilo tiene que ver con lo aprendido. Lo que nos transmitieron nuestro padres, lo que vimos, lo que escuchamos”, destaca la licenciada Sandra Pisu.
Lo cierto es que en la Argentina somos más emocionales y eso influye en la toma de decisiones. Tiene que ver con lo cultural, somos muy sanguíneos. “Esto cambiaría muchas conductas. La manera de corregir algo no consciente de la neurociencia es poder regularlo y de ese modo hacerlo consciente. Valorar que ser frontal no es una virtud, en cambio sí ser sincero”, comenta Bertone.
Como pasa con todo, la mente también se puede educar. Con formación, libros que sirvan de inspiración, capacitación en los ámbitos educativos. Hay personas que pueden hacer tratamiento psicológico y terapias neurocognitivas para aprender a utilizar el cerebro, saber cuáles son las emociones y entender qué sentimos, según cómo pensamos. “Lo mejor es tener la sombra por delante. Saber a qué nos enfrentamos, conocernos y tener en cuenta nuestros pros y contras. Las experiencias previas sirven, pero hay que observar el nuevo contexto”, cuenta Pisu. Bertone agrega que “tenemos un cerebro que funciona como el código de la computadora, donde las neuronas pueden excitarnos o inhibirnos. Funciona por sistemas, cada uno tiene activadores e inhibidores. Si soy una persona violenta y me dan mal un vuelto, quizá con un poco de inhibición no responda agresivamente”.
Para el ámbito laboral, “esos seis segundos pueden ser los aliados perfectos”, piensa en voz alta Mariana Lescano, de 40 años, administradora de empresas. Mariana siempre tuvo malas relaciones con sus jefes y fue aprendiendo a no chocar cada vez que algo le parece injusto. “Perdí dos trabajos por ser impulsiva, era más fuerte que yo. Desde hace un tiempo pude detectar el problema y con terapia lo voy mejorando”, reconoce.
“Cuando tomamos decisiones con la corteza frontal tenemos una visión más clara de lo que nos ocurrió en el pasado y una memoria perspectiva, que nos permite saber qué pasó en mi historia y cómo reaccioné. Es como armar un archivo de las decisiones que tomé en mi vida y planificar qué va a pasar”, aclara Bertone.
Federico Pereyra piensa en los viajes a Bahía Blanca con su familia. En varias ocasiones vieron accidentes de tránsito que ahora recuerda el accionar de su padre médico. “Era un 27 de marzo y ahí vimos el choque, dos autos destrozados. En una milésima de segundo, el viejo paró el auto y no dudó. Se bajó y se acercó buscando heridos, fue muy rápido. Su decisión fue clave en ese momento”.
Podemos entrenarnos para que el cerebro funcione bien. Hay preguntas que sacan respuestas casi en automático. ¿Qué me molestó de esa situación? ¿Cuál es mi elección ante dos propuestas laborales? En cambio, en otros casos se pueden simular respuestas y bajar la intensidad de las respuestas. ¿Cómo descubrir el botón interno? La meditación, el mindfulness y las terapias, pero sobre todo detectar situaciones que pueden traer problemas, no repetir errores y estar atentos para pulsar a tiempo ese botón que puede cambiar la vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario