Se llama Amilcar Perfecto Moyano, una ironía del destino, no es perfecto, es deficiente mental. Cuentan que cuando era chico, unos changos lo hicieron asustar una noche de invierno y quedo así. Amilcar fue, es y sera un símbolo del Club Atlético Unión y del barrio Chino; después su fama se extendió por todo Santiago del Estero.
Alto, de físico de aguja, bien peinado a la gomina, se prende la camisa hasta el ultimo botón y los pantalones apenas le llegan a los tobillos. De llanto fácil cuando se acuerda de sus amigos que ya no están. No es de molestar, solo cuando pide cigarrillos. Aunque a veces se vuelve cargoso, sobre todo cuando esta entonado.
Hincha fanático de Unión entra a la cancha como en su casa. Ningún control lo para, si forma parte del inventario del club. Había otro personaje en la entidad del barrio Chino, vencido por el alcohol, de apellido Jerez (no me acuerdo su apodo, por ahí mi amigo Pupi me lo sopla al oído, y me lo soplo nomas, "Chicho", "era un gran numero 6" me comenta el amigo Vozza) y se estrechaban con Amilcar, en medio de la tribuna, con un efusivo y prolongado abrazo, como si no se vieran de años y hacia solo segundos que se habían cruzado en la puerta de ingreso al club.
Recorría las peñas y clubes bailables, se acercaba a las mesas y sin pedir permiso tomaba un vaso, no importaba si era de vino o cerveza y hacia fondo blanco. Algunos se enojaban, la mayoría no, porque lo conocían. Amilcar Perfecto Moyano, todo un personaje, todo un símbolo de los milrayas.
Esta nota fue corregida porque como era de esperar apareció Roberto "Pupi" Vozza y me agrego mas datos, como el de que Amilcar sigue vivito y coleando y me hizo lagrimear cuando me contó una anécdota con mi padre, Pilo "El Gallego" Pelaez, hincha fanático de Unión además de socio e integrante de la Comisión Directiva. Me cuenta Pupi que "Tito" Molinari, gran amigo de mi viejo que supo ser presidente de los milrayas, lo tenia a Amilcar para hacerle bromas a sus amigos, lo mandaba a que les diera un beso, una costumbre que tenia este querido personaje. "En una oportunidad-me cuenta Vozza-estaban en la platea de Unión, Molinari en la parte superior y mas abajo tu viejo con unos amigos, y lo mando a Amilcar que le diera un beso, este fue y le toco la espalda, cuando se dio vuelta le encajo un pico en la boca...como se enojo el "Gallego" Pelaez".
Gracias Pupi por tu sabiduría, tu amistad y estos gratos y enormes recuerdos.
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