Es ella y siempre ella, después sus hijos, su madre, algún funcionario preferido, sobrevoloteando el escenario el y al fondo, aunque sus palabras no digan lo mismo, el pueblo, a donde ahora coloco al antes todopoderoso Hugo Moyano, y mucho, pero mucho mas atrás a todo lo que tenga uniforme, a los que odia.
La señora Cristina Fernandez de Kischner maneja todo, hasta es la directora de la transmisión oficial, ella indica a que funcionario "ponchar" y a quienes no. Fuera de protocolo aludió a Kirchner en su juramento y se hizo poner la banda presidencial por su hija Florencia. Si estaríamos en los montes tucumanos seria la comandante Cristina. Si fuera el circo romano ella decidiría quien vive y quien muere. Su poderío y arrogancia no tiene limites. Si en su discurso se cago en Peron y Moyano, cuando dijo: "Cuando estaba Peron no había derecho a la huelga. Ahora si hay derecho a huelga, pero no al chantaje y a la extorsión"
Además agrego un regalo mas al árbol de Navidad. Es sabido que el Monje Negro, primero de Nestor, y luego de Cristina es el indeseable de Guillermo Moreno; el Lopez Rega de los Kirchner quien muy pocos toleran, aun algunos de los que le palmean las espaldas. Le dio mas poder creándole una supersecretaria de Comercio que se encargara de interior y exterior, sin importarle que el pueblo argentino no lo quiera. Se dice tambien que lo mando a espiar a su vicepresidente por los servicios de inteligencia. Se trataría de conversaciones telefónicas en las que Boudou habría dicho a un interlocutor que debía finalizar la llamada porque "tengo que atender a la gorda" en lo que apareció una ofensiva indecorosa en propia alusión a la presidente y otra en la que mencionaba a ella como una concheta de La Plata, lo que Cristina repitió en publico calificándolo como un concheto de Puerto Madero. Fuentes irreprochables del gobierno aseguran que don Amado logro que la presi atendiera en forma reservada a Gustavo Beliz, ex ministro de Kirchner, y uno de los que denuncio a los espías estatales. Ese día Boudou se gano enemigos asperos y persistentes.
"Se va a cansar de recorrer los despachos de la justicia" sentencio alguna vez alguien, refiriéndose a Menem. Puede ser el caso de Cristina, cuando termine este periodo de cuatro años o menos. Todo puede ser. Se nos ocurre una presidencia similar a la del riojano. Un primer periodo bueno había plata, la de Menem producto de las privatizaciones; la de Cristina, con los ahorros que supo acumular su marido; para el segundo no hubo, ni habrá dinero y el camino se hace cuesta arriba.
A MODO DE PRESENTACION
No hay comentarios:
Publicar un comentario