EL GALLEGO Y LA "DESVESTIDA DE VERDE"

EL LUCHO CHOU (EN 3 ACTOS)

(Primer acto)

Poca gente lo sabe. Yo escribía, en el entonces diario “El Mundo” de Buenos Aires, desde la corresponsalía en Mar del Plata  y bajo la dirección de ese “mostro” del  periodismo que es Horacio de Dios, una columna diaria llamada “Ayer en la Bristol”.

Desde una mesa “avant  pasarela” miraba y anotaba  los  aconteceres de la playa, de los personajes (Mateyco,  Selpa, Troilo,  Monzón, Los Chalchas, Ringo Bonavena,  Bala,  Goyeneche,  vedettitas y vedetongas, levantadores de quinielas, gitanitos vende curitas y lustradores de zapatos en un mundo de pies descalzos. Toda una fauna, real, a la que agregábamos a personajes inventados como la “señora gorda de la malla negra con un bretel si y otro no” (en cuya boca poníamos cosas que nosotros no queríamos o podíamos decir) y otros ignotos, pero reales, como “El Ingles”, un señor que se especializaba en “levantar” señoritas en banda, darles de comer en “su mesa” del “Cubanito” y luego sacarlas pasear por la pasarela para lucirse y lucirlas. Un bife con ensalada o unos ravioles con receto, eran el costo de hacer de ”scort”  por un ratito.

Hasta que un día apareció ella. Sombrero verde, tules verdes, bikini verde, bolso de rafia verde,  sandalias verdes, pelo tenido de  verde y…perro marrón.

Y nació un clásico de esa época en “Ayer en la Bristol”: las aventuras de “La desvestida de verde”.Exitaso (perdón por la inmodestia) venían tipos de Playa Grande a ver si existía, la apludian al llegar a la playa, a las once en punto de la mañana, pedia, siempreen la misma mesa, su almuerzo frugal, pero…langostinos, o rabas, o bifecitos de lomo para su perro. Y siempre, invariablemente, algún busca le pedía al mozo que se la presentada y el coso terminaba pagando la cuenta total luego de haber tomado el, solamente un café. Y asi nació otro personaje, siempre distinto,  cuyo texto descriptivo iba, siempre, abajo del de la “desvestida”, “El paganini de hoy”.

Y asi nos pasamos todo un verano. Hasta que un dia, uno de los fotógrafos, el “Traca Gemelli” viene y me dice:” Lucho…me contaron que vienen los de Crónica, que viene el mismísimo gallego, y que vienen a descubrir quien es y que hace y de que vive la “desvestida”… te viene a afanar el personaje….”

Y como yo la la había usado todo un verano, ( y no nos habíamos hablado nunca, lo juro) decidi ganarle de mano a Crónica. Conseguí que José, el Mozo, me hiciera esa tarde una cita en su casa. Vivía en el último  piso del edificio de Luro casi Corrientes, donde había un teatro, abajo en el subsuelo un pub manejado por Andrés Larrieu

Y ella, la “desvestida” alquilaba un departamentito medio ambiente en la torre. Hija de un colchonero de Villa Crespo, pagaba el bulo con la plata que le daba el papa, almorzaba gratis en la Bristol, iba al cine, alguna noche iba a bailar a Constitución (vestida “normal”) amaba a su perro y…no era ni vedette, ni prosti, ni nada.

Y al dia siguiente, justo justo cuando llegaba Crónica en avión, con fotógrafos estrellas y de redactor estrella a su dueño, “Ayer en la Bristol” vistió a la “desvestida de verde” con su real personalidad. Publicamos fotos de ella cocinando en batón floreado, con el pelo (verde) envuelto en ruleros plásticos, con sus pies en chancletas  y el pedido…”señor…mi papa solo lee diarios en “idish”…pero por la dudas, no ponga nada malo  de mi…..vio?”

Y esa mañana de la publicación, el señor recién venido con toda la “troupe”, me busco en “El Cubanito”, me dijo cosas irreproducibles y se fue a buscar alguna otra nota que justificara el gasto de producción que había hecho para “desenmascarar” a una “ “desvestida de verde” que ya no era nadie mas que una señorita de la colectividad, que vivía en villa Crespo y trabajaba de colchonera con su papa.

Y así lo conocí.

(continuara)

LUCHO MARTINEZ TECCO