No se recuerda una presencia tan masiva de la prensa ante un espectáculo boxístico como este aluvión de los últimos días en el MGM Grand. Por eso los organizadores previeron la construcción de una gigantesca carpa en la parte de atrás del estadio para albergar a los medios escritos. Tiene una extensión de más de 80 metros por unos 30 de ancho. La sala de prensa tradicional, del hotel, también amplia, es ocupada por los medios audiovisuales. Y toda la zona circundante es un hervidero. Si compraron los derechos de televisación 150 países, se descuenta que el aparato promocional es descomunal. Y hasta no se descarta que semejante despliegue tenga más valor que el acontecimiento mismo. Es la ley del consumo que los estadounidenses saben aplicar con rigor. No parece natural que el enfrentamiento entre dos boxeadores maduros (más prestigioso -y arrogante- el invicto Mayweather) pueda levantar tanta polvareda. Pero ellos saben manejar el negocio.
La promoción de la reunión del sábado estará a cargo, principalmente de Mayweather Promotions (con la figura del enigmático Al Haymon detrás) asociada con la Tok Rank de Bob Arum que patrocina a Pacquiao, en porción minoritaria. También figura en el cartel el propio MGM Grand, que habría aportado 40 millones para lograr ser sede y las dos cadenas grandes televisivas. Showtime y HBO con sus sistema PPV (Pague para Ver). Una representa a Mayeather (Showtime) y HBO a Pacquiao. Por eso se asociaron, algo con muy pocos antecedentes. La última fue en oportunidad de la pelea entre Mike Tyson y Lennon Lewis, 13 años atrás. Y se repartieron los roles de los periodistas participantes. Por el lado de HBO estarán Jim Lampley y el conocido ex campeón Roy Jones Jr. Por Showtime estará Al Bernstein quien fue el analista del debut profesional de Mayweather por ESPN. Los dos anunciadores tradicionales subirán al ring. Jimmy Lennon Jr prsentará a Mayweather y Michael Buffer, a Pacquiao.
El negocio es gigantesco. Y tanto se buscan los dólares que por primera vez se cobraron las entradas para el pesaje en el Garden Arena. Siempre fueron gratuitos. Esta vez hubo que abonar 10 dólares para ingresar. La recaudación del estadio, ya consumada, será de 74 millones de dólares, récord absoluto. Por los precios, claro. Sólo salieron a la venta 1.500. El resto para completar los 16.500 de la capacidad la adquirieron los grandes hoteles para ofrecéselas a sus mejores apostadores.
Las apuestas favorecen a Mayweather (-200). Pacquiao (+170) para el caso de una victoria de uno u otro. Luego hay especificaciones de apuestas según las definiciones y el eventual asalto en el que se produzca un nocaut. El empate, por ejemplo, paga 8 a 1. Un nocaut a favor de Paquiao en el primero o segundo capítulo se cotiza 50 a 1. Si fuera para Mayweather, 40 a 1. Y hay otras variantes.
Pero el "corazón" del negocio es el PPV. Esperan vender 3 millones de abonos. A 90 los comunes y 100 dólares por HD. El récord es de la pelea entre Mayweather y De la Hoya, en 2007. Aquella vez se colocaron 2,480 millones. A un precio menor, claro. Y en el choque Mayweahter-Canelo Alvárez se vendieron 2,200 millones y la recaudación llegó a 152 millones a razón de 69 el abono. El 60 % de las ganancias será para Mayweather y el resto para Pacquiao. Se dice que el piso podría andar por los 180 para el invicto y 120 para el filipino. Pero se cree aquí que la diferencia será más amplia.
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