A MODO DE PRESENTACION

Ya esta. El sueño se cumplió. Dejare de escribir en las paredes, ahora tengo mi pagina propia. Soy un periodista de alma, que desde hace 40 años vive y se alimenta de noticias. Tenia 18 años cuando me recibieron en El Liberal de Santiago del Estero, el doctor Julio Cesar Castiglione, aquien le debo mucho de lo que soy me mando a estudiar dactilografia. Ahí estaba yo dando mis primeros pasos en periodismo al lado de grandes maestros como Noriega, Jimenez, Sayago. Gracias a El Liberal conocí el mundo. Viaje varias veces a Europa, Estados Unidos, la lejana Sudafrica y América del Sur, cubriendo las carreras del "Lole" Reutemann en la Formula 1. Después mi derrotero continuo en Capital Federal hasta recalar para siempre en Mar del Plata, donde nacieron tres de mis cinco hijos y conocí a Liliana, el gran amor de mi vida. Aquí fui Jefe de Redacción del diario El Atlántico y tuve el honor de trabajar junto a un enorme periodista, Oscar Gastiarena. De el aprendí mucho. Coqui sacaba noticias hasta de los edictos judiciales. Bueno a grandes rasgos ese soy yo. Que es Mileniomdq, una pagina en la web en donde encontraras de todo. Recuerdos, anedoctas, comentarios. Seré voz y oídos de mis amigos. Ante un hecho de injusticia muchas veces quisistes ser presidente para ir en persona al lugar y solucionar los temas. Eso tratare de ser yo. Una especie de justiciero ante las injusticias, valga el juego de palabra. No faltaran mis vivencias sobre mi pago, Visiten el lugar, estoy seguro que les gustara. Detrás de mis comentarios idiotas se esconde un gran ingenio.

jueves, 16 de febrero de 2012

MARCELINO PAN Y VINO



Director: Ladislao Vajda.
Intérpretes: Pablito Calvo, Rafael Rivelles, Antonio Vico, Juanjo Menéndez.
Película basada en una novela de José María Sánchez Silva. Con guión de José María Sánchez Silva ("El Hereje", "María, Matrícula De Bilbao") y Ladislao Vajda ("El Cebo", "Mi Tío Jacinto").
Marcelino (Pablito Calvo) es un niño abandonado a las puertas de un convento que terminará siendo educado por una docena de frailes.
En sus correrías infantiles se inventa a un compañero imaginario, Manuel, llegando a entablar una amistosa relación con el mismísimo Jesucristo.

El tacto fílmico de Ladislao Vajda y la recordada interpretación del niño prodigio Pablito Calvo son los principales logros de esta exitosa película que no solamente triunfó en las carteleras españolas, sino que consiguió también un importante reconocimiento en diferentes y variados países, desde Italia hasta Japón, logrando una meritoria mención especial del jurado en el prestigioso Festival de Cannes y un premio en el Festival de Berlín.






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MARCELINO PAN Y VINO

VER PELICULA

Cine con valores cristianos y cultura de la vida
En la austera Castilla, doce frailes franciscanos reconstruyen su convento, destruido por las guerras contra los franceses. Un día, el hermano portero encuentra en la puerta a un recién nacido abandonado, y la comunidad decide hacerse cargo de él.

Marcelino crece entre travesuras y el cariño de los frailes. Una mujer le habla de su hijo Manuel, a quien no llega a conocer, pero, desde entonces, se convierte en su inseparable amigo imaginario.

El P. guardián de la casa ve que el niño crece sin el afecto de una madre y cree llegado el momento de buscarle una familia de adopción. Se lo propone al herrero del pueblo, pero el cariño de los frailes puede más, y Marcelino permanece con ellos.

Todo cambia para cuando, desobedeciendo la prohibición de los religiosos, Marcelino decide subir al desván. Allí descubre una gran imagen del Crucifijo que le hace correr de espanto; pero la curiosidad puede más y regresa. Entonces el miedo se transforma en compasión y nace una emotiva y dulce relación entre el Cristo y Marcelino, que cada día roba de la cocina pan y vino, para llevárselos.

El tema de la madre es siempre el centro de la conversación entre ellos y el pequeño expresa su deseo de irse al cielo, para estar con su madre y con la de Jesús. Mientras tanto, los religiosos, que han notado el cambio en el comportamiento de Marcelino, lo siguen hasta el desván, en donde son testigos de cómo el pequeño se "duerme" en los brazos de Cristo.

Un periódico japonés llegó a decir: "Con películas como ésta, se arreglaría nuestra sociedad en poco tiempo". 

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