La inminente boda de Lionel Messi y su novia, Antonella Roccuzzo, tiene todos los ingredientes de una telenovela: festejo en dos países (España y Argentina), incógnita acerca de si Gerard Piqué y la cantante Shakira finalmente asistirán o no al casamiento, el lanzamiento de una firma de moda de la llamada «primera dama del Barça» y el debut del propio Leo como empresario en nuestro país, con la compra de un hotel-boutique en Sitges (Barcelona) valorado en 30 millones de euros. Ahora, entra en escena el cambio de su wedding planner en su país natal a menos de un mes del «gran día», el viernes 30 de junio.
La cuestión, además, toma por momentos una tonalidad aún más llamativa si se pone el foco en el personaje que está el frente de la administración de todos los gastos vinculados al enlace matrimonial: nada menos que Jorge Horacio Messi, el padre del jugador, quien constantemente se encuentra en el ojo del huracán por los manejos financieros en la carrera de «La Pulga». Y, en especial, por las irregularidades en el pago a Hacienda.
Según informan medios argentinos, al progenitor de Messi no le convencía las exuberantes cifras propuestas por la organizadora de la boda (parece ser que el presupuesto se había disparado en la recta final), así que sugirió reducir drásticamente la cantidad de invitados: pasar de 600 a 250 personas. Todo ello desató una fuerte discusión que acabó con la salida de la wedding planner de la organización. Sumado a esto, también hay modificaciones en el lugar escogido para la fiesta: del original Hotel Puerto Norte de Rosario se ha pasado al City Center, el casino de la mencionada localidad. Al cierre de esta edición, la cantidad de invitados no está confirmada.
«Primera dama porteña»
Como si hasta aquí la historia no tuviera suficiente morbo, a este escenario se suma quién es la wedding planner destituida por el suegro de Antonella, que, por cierto, cuenta con el beneplácito de todo el clan. Se trata de Bárbara Diez, nada menos que la esposa del Jefe de Gobierno de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, el principal funcionario que tiene el macrismo dentro de la capital argentina.
Fuentes próximas a la organizadora confirman a ABC que está furiosa. No en vano, Diez no es una novata en estas lides: ya tuvo a su cargo algunas de las bodas más importantes del país latinoamericano, como la del propio presidente Mauricio Macri con Juliana Awada. Además de una «mancha negra» en su historial, su despido también implica que queda fuera del suculento negocio derivado del casamiento de Leo y Antonella.
Consuelo y silencio
El enfado de Diez, al saber de su exclusión de la boda más esperada del año en Argentina, fue tal que las redes sociales se convirtieron en espacio de consuelo por parte de sus seguidores. «No necesitas que te contrate Messi para lucirte. Sos la mejor en el país y eso no lo cambia nadie. Abrazo grande», escribió uno de ellos.
Si bien frente a este cálido gesto la organizadora respondió que no era necesario consuelo alguno, fuentes cercanas a Diez admiten a ABC que está enervada. Parece ser que las elevadas cifras que manejaba eran la causa de que el astro del fútbol tomara la repentina decisión de romper su contrato. Desde la oficina de Diez se limitan a asegurar que «por ahora, no estamos hablando del tema y no hay más información que la que se conoce». De hecho, las mismas fuentes cuentan que si bien habitualmente la empresaria deriva gran parte del trabajo a su equipo, en esta ocasión había sido ella misma quien un año atrás se encargó de llevar las riendas del evento, pues suponía dar un paso clave en su trayectoria profesional. «Esta será la cúspide de mi carrera», había dicho la mujer del Jefe de Gobierno porteño.
Demetrio Alejandro Chamatropulos, socio de Chamatropulos Abogados & Consultores, a requerimiento de este periódico sobre si la despedida puede iniciar acciones judiciales contra el futbolista, aclara que «el servicio de un wedding planner está incluido dentro de las normas de defensa del consumidor, por lo cual, en caso de que el proveedor del servicio contratado no cumpla o genere algún perjuicio para el consumidor, como puede ser un sobreprecio o un cambio de las condiciones contractuales originalmente informadas, este último podría válidamente decidir poner fin al contrato sin consecuencias patrimoniales en su contra».
Hace exactamente un año, Horacio Rodríguez Larreta, marido de Bárbara Diez, dedicaba una imponente estatua al jugador culé en plena ciudad de Buenos Aires, al tiempo que le pedía en un discurso público que no abandonara de ninguna manera la selección nacional, ante la amenaza de Messi de dejar de portar la camiseta albiceleste. Luego, en las redes sociales, el político había agradecido al jugador el retorno al equipo.
No cabe duda de que hay preocupación en Argentina ante cómo podría afectar este asunto a las relaciones entre el jefe de Gobierno porteño y el futbolista rosarino, dado que Messi será la imagen de los Juegos Olímpicos de la Juventud, que tendrán lugar el próximo año en Buenos Aires. En este punto, cabe señalar que Bárbara Diez, además de su faceta como empresaria, desarrolla a la perfección su papel como «primera dama porteña», promocionando algunas actividades de carácter político en la capital argentina, y en las que acompaña a su marido.
Una boda en tres semanas
Quienes salieron beneficiados con los cambios de última hora que implementaron «La Pulga» y su prometida son los nuevos organizadores, Lorena Farina y Adrián Pavía, que apenas tendrán tres semanas para poner el enlace a punto. Como contrapartida de lo que le ha sucedido a la mujer del político macrista, ellos recibieron felicitaciones y enhorabuenas a través de la web. A diferencia de Diez, que planificaba los detalles del casamiento desde Buenos Aires, la nueva firma opera en la ciudad de Rosario, de donde tanto el astro como Antonella son oriundos.
En todas las cuestiones en las que el delantero del equipo azulgrana aparece mencionado en algún asunto que genera polémica, se repite una figura: la de su padre. Hace menos de un mes, el periodista de ABC Javier Chicote publicaba que la Fundación Messi, cuyo presidente es el propio Jorge Messi, había destinado la elevada cifra de 550.000 euros a refacciones en su sede ubicada en la Ciudad Condal.
A poco menos de un mes del gran evento que consolidará el amor de «La Pulga» con su pareja, Antonella, su progenitor vuelve a figurar como administrador de los gastos del exitoso jugador. Parece el perejil de todas las salsas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario